Una de las figuras fundamentales del ballet mundial regresa a Chile para presentar, junto a su compañía, un repertorio deslumbrante que cruza lo clásico y contemporáneo.
La compañía Acosta Danza, dirigida por el reconocido bailarín cubano Carlos Acosta, llega a Santiago a Mil con cinco piezas que representan lo mejor de su repertorio, una deslumbrante fusión entre ballet clásico y danza contemporánea. La primera es Imponderable (2017), creada por el coreógrafo español Goyo Montero para la compañía, con música de Owen Belton a partir de la obra del cantautor cubano Silvio Rodríguez: “Una reflexión sobre lo incomprensible, lo indescriptible y lo que,
como dice el título, no podemos medir, el peso del alma, el espíritu”, explica Montero. Luego será el turno de Fauno (2009), del belga Sidi Larbi Cherkaoui, un pas de deux con música de Claude Debussy. Después vendrán Alrededor no hay nada (2016), de Goyo Montero, con poemas de Vinícius de Moraes y Joaquín Sabina; Mermaid (2017), de Sidi Larbi Cherkaoui, otro dueto creado especialmente para tener en escena a Carlos Acosta y Marta Ortega, y Diez (2017), del español Jorge Crecis, una pieza de danza-deporte que pone a prueba la resistencia física y mental de diez bailarines que llevan sus cuerpos al límite.