Un Manto de Agua que nos calma y nos transforma 

Una obra que te acerca a la paz,  a la meditación, un manto que que te calma. Las telas, el agua y su azul se convierten en protagonistas, fluyen, transforman, crean. Un color intenso de agua pintado con agua, ese color que nos produce tranquilidad, profundidad, inmensidad, ese tinte que sana. El agua transformando y creando en las telas con el color de una planta. Una gota que se expande al tocar , un sentir que expresa al crear. Un ambiente, una escenografía que se despliega abriendo distintos caminos al encuentro . Desde el inicio, desde donde nace todo, desde el mar, desde su agua, un elemento imprescindible que nos da vida. El agua que somos, esa agua azul índigo que viene a limpiar, a transformar, a recargar de energías, a volver al centro, a lo que somos. Somos agua y a través de ella sentimos y nos transformamos. Dejémonos  envolver con ese manto de agua, ese manto que nos cubre desde el inicio de nuestra vida.

Algunas palabras que nacen de mi sentir al estar inmersa en la bella exposición “Manto de Agua” en el Teatro de Zapallar de la destacada artista visual chilena Andrea Lira una muestra que invita a sumergirse en un viaje sensorial de contemplación, emociones profundas y conexión con la naturaleza.

 A través de telas teñidas con índigo natural y técnicas de textilería japonesa, la artista transforma elementos de la naturaleza, el mar y la poesía de lo cotidiano en un manto que abraza los sentidos. Esta experiencia artística propone una pausa en el tiempo, un llamado a reflexionar sobre la impermanencia de la vida y la belleza inherente a los ciclos naturales.

Una experiencia que fluye como el agua

“Manto de Agua” es una obra que fluye con suavidad, como el agua que nos envuelve, recordándonos la importancia de vivir el presente y valorar cada instante. Es una exposición que combina arte textil, poesía visual y naturaleza en una experiencia inmersiva y única.

Como artista estoy en una constante búsqueda hacia la belleza. La belleza que se encuentra en la impermanencia de la vida, la simpleza de la naturaleza y la fragilidad de nuestras emociones.Mi trabajo está inspirado, por todo lo que me rodea, especialmente los ciclos de la naturaleza, la poesía que encontramos en un amanecer, la transformación de una flor o una montaña atravesando la neblina.

Cuando observamos la naturaleza con detención, nos damos cuenta de que es un milagro. Manto de agua, es una metáfora de entrar al mar, sumergirte desde afuera hasta dentro de tus emociones. Y el azul, que lo extraigo de una planta llamada indigofera Tinctorea, representa las capas del azul que hay en el mar y en nuestro inconsciente. Como arista yo trabajo con todas esas emociones. 

 El fluir de las telas y el tinte azul me permiten movilizar esas aguas, creando un proceso creativo que está en constante transformación. Al mismo tiempo mi trabajo también está inspirado en el arte textil Japonés, trabajo con reservas de bordados shibori y reservas con pasta de arroz, técnicas que implican atención y paciencia. En general admiro las filosofías orientales, como el budismo zen, que nos enseñan a contemplar, a valorar lo esencial y estar muy presentes en lo que estamos haciendo. Andrea Lira para Cultura Zapallar

 

Escrito de Soledad García para dar inicio a la exposición

Cuando se vierte agua en el mar, se abre una estela solar, las espumas se disuelven y regresan a la densidad acuosa. Es la transformación de un tiempo circular.

Las obras de Andrea Lira concentran en telas, tintes y costuras las sensaciones internas y externas que abundan en los espesores y sutilezas del agua, aquellas vivientes en nuestro cuerpo, contenidas en la inmensidad de los océanos. Son experiencias enlazadas por los sueños, que vibran en lo profundo como una gota que recuerda ese estímulo del inconsciente. Y que despiertan cada día en un oficio meditado y lento de las manos azuladas de Andrea teñidas de índigo, para revivir en las telas, la protección, liberación y sanación de las aguas internas; las de dentro y las de afuera, las sucias y amorosas, las tuyas y las mías. Mover las aguas es entrar al vértigo de la mente para transmutar los ahogos en solturas, es saltar al vacío envueltos por la piel que nos cubre como un manto acogedor.

El azul es la semilla que inspira esta exploración y que nos traslada al nacimiento y la impermanencia, donde la vida pende de un hilo. Es el transitar por los caminos inciertos en compañía de los profundos azules que brotan hacia la superficie como un Manto de agua.

Imágenes María Jesús Ossa Directora de ellalabella 

Teatro zapallar
Hasta el 14 de septiembre