Desde su creación en el 2010, el Festival Internacional de Fotografía de Valparaíso ha crecido en audiencia y repercusión. Fotógrafos nacionales y extranjeros llegan cada año a la ciudad puerto para participar de residencias, talleres, brigadas y exposiciones. En este sueño de conectar Valparaíso con el mundo a través de la imagen, nació la primera biblioteca especializada en fotografía del país.
Durante la edición del FIFV 2014 se levantó una muestra de estos libros en el Parque Cultural de Valparaíso. En una larga mesa de la sala de exposiciones fueron atornillados para que el público pudiera hojearlos. “Veíamos a la gente que llegaba muy temprano y pasaba tres horas, con mucha paciencia, viendo libros. Eso nos motivó a pensar en un lugar donde las personas pudieran acceder permanentemente y verlos con tranquilidad”, dice Freddy Ojeda, productor y parte del equipo editorial del FIFV.
Al año siguiente se levantó una convocatoria para artistas latinoamericanos. Llegaron más de 350 fotolibros de Méxcio, Venezuela, Brasil, Cuba, con las temáticas más diversas, desde grandes casas editoriales hasta autoediciones artesanales con muy pocos ejemplares. La muestra de estos libros se replicó en el mismo centro cultural y el éxito fue rotundo.
Así, en noviembre de 2015 comenzó a funcionar de jueves a sábado esta biblioteca, que está ubicada en pleno barrio Almendral, a los pies del cerro Florida, en una casa porteña de techo alto y ventanales amplios, donde se llega golpeando la puerta y la calidez es tal que no es extraño que te ofrezcan un té o un café. La única recomendación es llegar temprano porque el tiempo entre las 10:00 y las 14:00 –que es el horario de funcionamiento- se pasa volando.
Gran parte de los libros que anidan en la biblioteca del Festival Internacional de Fotografía de Valparaíso (FIFV) están acribillados en su contraportada. Cualquiera se sorprendería al ver agujereados libros de tal factura, pero este hecho particular responde el por qué se monta en el espacio Buenos Aires 824 –organización comunitaria y centro de operaciones del FIFV- la primera biblioteca dedicada exclusivamente a la fotografía.
Los Encuentros de Arlés es el festival de fotografía más connotado de Francia. Desde su creación en 1970 se ha convertido en la vasija que aglutina y difunde gran parte del patrimonio fotográfico mundial. Cada año llegan cientos de trabajos con el fin de obtener el Premio del Libro en sus dos categorías: libro de autor y libro histórico. La colección reunida se transforma en propiedad de la organización y cada año es donada a una determinada institución. El año 2013 el FIFV recibió desde la ciudad de Arlés, en el sur de Francia, 650 fotolibros, que se convirtieron en la base de la actual biblioteca.
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