Hice un registro de las obras que más me gustaron, y aquí les cuento un poco sobre lo que me paso con algunas de ellas, lo que me hicieron ver y sentir.
Quiero destacar la estética del uso de medicamentos en el arte, en como la artista crea un verdadero bordado con pastillas que en el día a día sirven para tranquilizar a las personas, remedios usados como mostacillas para embellecer y resaltar, en este caso embellecer a una novia nerviosa, asustada, o cansada, mostrando el tras bambalinas de esa novia, ese sentir que se esconde bajo el vestido blanco y sus accesorios.
¿Será que la sociedad nos tiene así? y el que dirán, los prejuicios, el aparentar, nos hace ser menos libres, y asustarnos y necesitar de medicamentos para poder soportar. Como abordar estos temas, que difícil se hace en una sociedad que muchas veces nos priva de libertades por el que dirán, sobre todo en muchos de los ámbitos de la vida de la mujer, que aquí bien los trata la artista.
Será que los remedios son como los dulces para los niños, llenos de colores y formas distintas que cubren nuestros males no trabajados. Cuando un niño llora la mayoría de las personas acude a un dulce (o así lo veía en mi infancia), el adulto cuando siente algo malo en su mayoría lo primero que hace es acudir a la pastillas, no todos claro, hay excepciones, así como también hay pastillas muy necesarias para problemas crónicos y que ayudan a sobrellevar enfermedades que sin ellas no tendrían solución. Yo me refiero a esas pastillas que se toman sin tanta consciencia, sin haber hecho antes una introspección del porque está ese síntoma ahí, será que hay una emoción atrapada, un problema no trabajado, algo que no queremos ver, puede ser, muchas veces lo es, pero siempre se acude primero a lo fácil y rápido, al remedio.
El uso desmedido de remedios adormece, desensibiliza, y puede dejar grandes huellas cuando nos es usado de forma holística y con consciencia, muchas veces los efectos secundarios son a largo plazo. No tapemos con las pastillas los síntomas, tratemos de trabajarnos antes porque si no siempre volverán a parecer, hay que sacarlos de raíz, hoy hay tantas formas, tantas terapias, alternativas, centros de sanación, retiros y más…, solo hay que buscar la que a cada uno le acomode, y conectar con nosotros y con la naturaleza.