Miren esta maravillosa y creativa manera de conservar nuestra naturaleza. Hace algunos años navegando por internet me encontré una bella imagen de una escultura de una niña bajo el agua, me metí a investigar y encontré todo un mundo que unía el arte con la naturaleza. Mirando más a fondo este proyecto me di cuenta que estás figuras sumergidas no habían sido creadas solo con un fin estético, sino que su gran objetivo era lograr la conservación de nuestro medio ambiente.
Estas esculturas forman parte de una compleja estructura de arrecifes de más de 500 obras hechas a tamaño real que favorecen la colonización de la vida marina ya que se utilizó un tipo de cemento que atrae y fomenta el crecimiento de coral sobre las obras, las que van evolucionando con el tiempo.
Lo más bello de todo es como empieza a fusionarse las figuras el mundo marino, los corales, las esponjas, las algas, y los peces nadando a su alrededor pintan de color el cemento gris, vistiéndolas de mil colores dándole así vida a las obras. Es todo un proceso que no acabará nunca, estarán siempre evolucionando junto a la naturaleza. Es increíble lo rápido que el ecosistema está creciendo alrededor de éstas.
El Arte que evoluciona junto a la naturaleza
Las esculturas son muy reales, los gestos, los pliegues de las ropas, y muchos de sus temas cotidianos crean una verdadera sociedad submarina, incluso hay artistas famosos retratados y sumergidos.
Bajo el agua, todo se magnifica en un 25%, la luz se refracta, los colores cambian, la obra evolucionan, y la interacción de estas con el mundo marino crean mágicas y surreales imágenes las que se transformar también en otra obra de arte.
Las esculturas fueron realizadas por el artista británico Jason de Caires Taylor, de padre Inglés y madre guyanesa. Taylor creció en Europa y Asia, donde pasó gran parte de su primera infancia explorando los arrecifes de coral de Malasia. Educado en el sureste de Inglaterra, Taylor se graduó en el Instituto de las Artes de Londres con una licenciatura con honores en Escultura y pasó a convertirse en un completo instructor de buceo y naturalista subacuático. Con una experiencia de más de 20 años de buceo en su haber, es un galardonado como fotógrafo submarino.
Una de sus obras que más me gusta se llama “The Silent Evolution” (La evolución silenciosa) y cada una de las estatuas fue creada basada en personas reales que viven en las comunidades cercanas a la zona. La expresión de estas estatuas es su interpretación al constante cuestionamiento que todos nos hacemos (o deberíamos hacer) con respecto a nuestro impacto en el medio ambiente.
Jason hace crecer este proyecto creando en conjunto con varios artistas un gran proyecto, un museo subacuático contemporáneo llamado MUSA (Museo Subacuático de Arte) que está ubicado en las aguas que rodean Cancún, Isla Mujeres y Punta Nizuc.
Gran obra de arte, como me gusta cuando se une el arte y la naturaleza dos de las cosas que más me apasionan. Con este proyecto se demuestra como el arte puede ayudar para muchas cosas en este planeta, no solo crear experiencias y emociones positivas, también cuidar nuestra naturaleza, que hoy en día lo necesita más que nunca.
MUSA Museo Subacuático de arte, «El arte de la Conservación»
En 2009 se formó un monumental museo subacuático contemporáneo llamado MUSA (Museo Subacuático de Arte) en las aguas que rodean Cancún, Isla Mujeres y Punta Nizuc. El proyecto fue fundado por Jaime González Cano, Director del Parque Marino Nacional, Roberto Díaz Abraham, entonces Presidente de Asociados Náuticos de Cancún y Jason deCaires Taylor el escultor inglés. Ahora es una de las mayores y más ambiciosas atracciones submarinas del mundo, con más de 500 esculturas permanentes de tamaño natural.
El Museo tiene como objetivo demostrar la interacción entre el arte y la ciencia de la conservación del medio ambiente. Forma parte de una compleja estructura de arrecifes que favorece la colonización de la vida marina, al tiempo que aumenta la biomasa en gran escala. Todas las esculturas se fijan al fondo del mar y están hechas de materiales especiales utilizados para promover la vida coralina. Las instalaciones ocupan una superficie de más de 420 m2 de sustrato estéril con un peso de más de 200 toneladas.
El Parque Marino de Cancún-Isla Mujeres, es una de las zonas marinas más visitadas en el mundo, con más de 750,000 visitantes anuales, afectando en alguna medida las estructuras naturales arrecifales. La ubicación de las esculturas de MUSA promueve la recuperación de los arrecifes naturales ya que alivia la presión ejercida sobre ellos al ofrecer a los visitantes un sitio alternativo distante, pero dentro de la misma área natural protegida. En los últimos años el Museo ha recibido aclamación mundial y ha generado millones de dólares en promoción del snorkel y buceo.
La presentación se divide en dos galerías denominadas Salón Manchones y Salón Nizuc. El primero es de ocho metros de profundidad, adecuado tanto para buzos como para nadadores y el segundo es de cuatro metros de profundidad, sólo apto para el snorkel.
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Esculturas Fuera del Agua
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Proceso de creación de las esculturas
Mira aquí todo el proceso para hacer las esculturas y llevarlas al fondo del mar
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Fuente: underwatersculpture