Estudio confirma que mirar el mar activa el estado de felicidad en el cerebro

Afirman que el sonido que emite reduce nuestros niveles de cortisol y nos transmite calma.

Ya llevamos cuatro semanas en cuarentena, encerrados en nuestras casas, sin salir, con suerte a comprar al supermercado, sin ver a los nuestros y sin poder conectarnos con la naturaleza. De las cosas que más hecho de menos es el mar, éste es mi terapia, ya sea bañarme, escucharlo o simplemente mirarlo, éste nos  da felicidad y nos quita las energías negativas  y estrés acumulado. Hay que aprovechar que tenemos tan cerca la playa y que nuestro Chile está rodeado de mar.
Cada día hay más estudios que demuestran como el mar influye en nuestro bienestar, éste nos aporta felicidad y tranquilidad. Yo les puedo hablar desde mi experiencia, pero aquí  encontré un artículo de un estudio que lo demuestra, así que los invito a leerlo.

Un equipo de científicos se dedicó a estudiar la relación existente entre la salud y el contacto con la playa para un proyecto llamado BlueHealth, donde descubrieron que el sonido del mar reduce nuestros niveles de cortisol, la hormona del estrés y nos transmite calma.

De acuerdo a la indagatoria, el hecho de que una persona se pare a observar el mar comienza a generar diversas reacciones específicas en la zona del cerebro, dando inicio a reacciones que promueven una reacción de satisfacción.

 

Los investigadores descubrieron que la resonancia del mar estimula la corteza prefrontal, un parea del cerebro responsable de nuestras emociones y reflexión personal, por lo que nuestros cerebros logran ampliar la capacidad de autoconocernos y sentirnos bien emocionalmente.

Asimismo, el sonido del océano genera en las personas iones negativos, los cuales al ser recepcionados por el humano, promueven modificaciones moleculares que dan la sensación de paz.

Según sitios especializados, existe otro estudio que afirmaría esta investigación, donde incluso han sugerido que el sonido que emite el mar nos recordaría los latidos del corazón que sentíamos cuando estábamos en el vientre materno.

El neurocientífico Michael Merzenich explicó también que uno de los placeres de mirar el mar se debe a que «percibimos un entorno predecible y estable».

fuente 24 horas

Aquí les dejó un artículo que subí sobre el poder sanador de bañarse en el mar. Éste puede limpiar malas energías, sacar el estrés y la angustia del día a día en una sociedad muy cansadora, y más ahora con lo que está pasando, tal vez la gente necesitaría menos remedios si en vez de estos se bañara más en el mar, no solo pro refrescarse si no como una terapia natural que creo que muchas veces son más efectivas que un remedio. 

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