Éstas fotos de las sociedades matriarcales tomadas por el fotografo Pierre Vallombreuse muestran cómo se ve la igualdad de género en todo el mundo. En éstas tribus del sudeste asiático, las mujeres comparten el poder.
Una niña posa con confianza, con las manos en las caderas. Ella lleva una delicada flor en el pelo, y se encuentra al fondo de la foto, hay algo dominante sobre su presencia. Para su edad, parece severa y segura de sí misma: donde vive, ser una niña no parece ser un ataque contra su confianza.
La foto fue tomada en Badjao, Malasia, una de las cuatro sociedades del sudeste asiático fotografiadas por el fotógrafo Pierre de Vallombreuse , para un proyecto destinado a representar a las sociedades donde la igualdad de género ya está en camino de fructificar o, al menos, más lejos que en el Oeste.
En particular, captura imágenes de la sociedad Khasi, una cultura matrilineal y matrilocal en la parte noreste de la India, en la que los niños llevan principalmente el nombre de su madre y la herencia se concede a las hijas en una familia; la sociedad de Palawan, una comunidad no jerárquica en Filipinas donde hombres y mujeres han sido históricamente iguales; la sociedad Mosuo en el sudoeste de China, que involucra una variedad de matriarcados y jerarquías avunculares; y los grupos igualitarios y libertarios en Badjao.
De Vallombreuse ha estado tomando fotos de estas sociedades indígenas durante casi 30 años. Su trabajo tiene una inclinación antropológica, ya que una vez fue el Secretario General de la Asociación de Antropología y Fotografía en la Universidad Paris Diderot. Por lo tanto, sus hermosas fotos son más que aparentes representaciones de la igualdad de género; también pasó tiempo observando las respectivas tradiciones de cada cultura.
Según el fotógrafo, lo que ha aprendido a lo largo de su trabajo es prometedor para el futuro de la sociedad occidental, y para aquellas sociedades que hoy están influenciadas por la globalización. En un comunicado de prensa sobre su último libro y exposición, Arthaud Publishing escribió: «De hecho, en algunas de estas culturas, las tendencias parecen revertirse: las mujeres ocupan un lugar central en las bases sociales y espirituales, preservando o promoviendo la igualdad entre los sexos con total respeto mutuo Hay modelos para la sociedad donde la posición de las mujeres no es una batalla «.
fuente:huffingtonpost